Saca el sartén, ese que ya casi no tiene teflom pero por alguna causa es su favorito, prende la lumbre y agrega un poco aceite; mientras se calienta, pica finamente un poco de cebolla con sus respectivas lágrimas, corta una tortilla en pequeños cachitos y los agrega al sartén, uno o dos huevos para terminar, un cafecito y una rica conchita. Después de este desayuno está listo para su día de Godinez.
Foto tomada de: http://cocinaycomparte.com/recipes/migas-con-huevo